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El término de “impresión gráfica” comenzó a utilizarse tras la invención de la imprenta por Johannes Gutenberg cerca del año 1450, como una forma de agrupar todos los oficios relacionados con la impresión tipográfica; utilización de los tipos, la impresión, la encuadernación, el acabado, y todas aquellas variantes y procesos adicionales que se le hacían al material impreso. Posteriormente fueron apareciendo nuevas técnicas, como la litografía, que hicieron evolucionar al sector hasta lo que conocemos hoy en día.
“La impresión y producción gráfica puede hacer de tu campaña algo extraordinario”
En la actualidad, podríamos definir la “producción gráfica” como aquella disciplina indispensable en el ámbito del diseño gráfico y la publicidad, basada en la reproducción de proyectos mediante la impresión sobre diferentes soportes, con multitud de técnicas y diferentes acabados. Esta disciplina requiere de conocimientos específicos en publicidad y marketing, diseño gráfico, diseño editorial, nociones de materiales y procesos de producción en imprenta.
Dentro de los procesos de producción gráfica existen diferentes fases, para las cuales debemos realizar una planificación previa.
En primer lugar, tienes que tener muy claras las necesidades del trabajo. Debes conocer los objetivos del proyecto, qué es lo que quieres conseguir, hacia qué público objetivo va dirigida tu campaña, el soporte y técnicas a utilizar, la cantidad de ejemplares a producir, los costes y los tiempos con los que vamos a contar.
Los costes estarán directamente relacionados con las características técnicas del proyecto: el formato, los materiales, el sistema de impresión, los acabados, la cantidad de ejemplares y el tiempo requerido para su ejecución.
En la mayoría de las ocasiones, toda esta información vendrá recogida en un documento denominado “Briefing”. Este documento se suele elaborar entre diseñadores, project manager y cliente, para que todos los puntos queden perfectamente reflejados.
“La importancia en la coherencia entre el concepto y la producción”
Para el desarrollo del diseño y la realización del proceso de preimpresión, se puede trabajar con programas diseño como Adobe de Illustrator, Photoshop e InDesign, los cuales te proporcionarán multitud de herramientas que te facilitarán el proceso de edición..
Con este proceso de “preimpresión” obtenemos el diseño final, que enviaremos a imprenta para su producción. A este diseño se le denomina “Arte final” , el cual es un documento digital ya preparado para impresión, que no necesita ningún tipo de modificación o intervención más. Este archivo debe incluir todas las especificaciones técnicas que te contamos a continuación:
Cuando preparas un documento para impresión, siempre debe contar con un margen exterior a la línea de corte, denominado “sangrado”.
El “sangrado” es un área por fuera de la mesa de trabajo hasta el que extienden todas las imágenes de color, para que cuando se imprima y se corten los impresos, no queden partes blancas en tu diseño.
La sangre del documento suele oscilar entre 3mm y 8mm, según el tipo de impresión. Por ejemplo, si se imprime sobre un vinilo, lo mínimo que debes dejar son 3mm.
El color es unos de los ingredientes más importantes que debes mimar en tu diseño, puesto que este elemento puede ser un factor decisivo para el éxito de tu proyecto.
El color interviene, tanto en la parte plástica de nuestro trabajo, como en la parte emocional. Es por lo que a la hora de elegir los colores que vas a incorporar en tu campaña, debes tener claros los objetivos y conocer muy bien a tu cliente final.
“Investigar el significado de los colores y el impacto de cada uno de ellos, te va a ayudar a tener más probabilidades de éxito en tu trabajo.”
Los colores nos hablan y, al igual que las palabras, estos también nos transmiten emociones, deseos, objetivos, metas, sensaciones…etc.
Por lo tanto, a la hora de elegir la paleta de colores del diseño, no debes perder de vista las cualidades psicológicas de cada color, y en base a estas desarrollar un diseño más objetivo al tipo de producto o servicio que tienes.
Del mismo modo, la cultura, la experiencia personal y el estado de ánimo de cada persona tienen gran influencia en este asunto.
Por otro lado, está la parte técnica en la que intervienen los colores, y que tienes que dominar, para que cuando el diseño pase por la fase de impresión no te lleves sorpresas.
Lo primero que tienes que conocer son los dos modelos básicos de color:
RGB: Colores aditivos o colores luz. Se conocen así porque estos colores provienen del espectro visible de la luz que podemos ver con el ojo humano. Dentro de estos colores, se encuentran los tres primarios, el Rojo, el Verde y el Azul (Red/Green/Blue), y a partir de estos se forman el resto de los colores luz.
Este modelo de color se puede utilizar en la iluminación de una escena de teatro, en un monitor de ordenador o en una cámara fotográfica. Dentro del mundo del diseño, este modelo de color solo se utiliza para el diseño digital.
CMYK: Colores sustractivos. Estos colores también dependen de la luz que perciben nuestros ojos, pero en este caso, es el color que percibimos de una superficie cuando la luz incide en ella. El color variará en base a las cualidades de esta superficie, por lo que dentro de la producción gráfica, variará en base a la tinta y el material sobre el que imprimamos.. Los colores primarios sustractivos son el Cian, el Magenta, el Amarillo y el Negro.
Por lo tanto, este sistema de color será el que se usa en el diseño gráfico de impresión, utilizando las tintas de los 4 colores.
Siempre debes revisar que las imágenes que incluyas en tu diseño, tengan la resolución adecuada y que el modo de color sea el correcto.
La resolución es una cuestión, que en el mundo de la impresión digital, es importante cuidar para que el resultado sea óptimo. En base al tipo de impresión que vayas a hacer, las imágenes que utilices tendrán una resolución u otra.
Las impresiones de alta calidad, nunca deberán tener menos de 300ppp. En el caso de las impresiones de calidad media, o periódicos/folletos, se puede bajar esta resolución, pero siempre con cuidado de que quede lo mejor posible.
Puedes utilizar diferentes tipos de formatos, como el jpg, pdf, tiff… etc., siempre y cuando los archivos tengan las calidades necesarias para el proyecto que vayas a realizar.
Es recomendable trabajar desde el primer momento la resolución y tamaño a la que se va a imprimir el trabajo, para que no surjan imprevistos.
Las marcas de corte son otro elemento super importante que tienes que manejar para el proceso de diseño de preimpresión.
Se conocen como “Marcas de corte” a las líneas que indican al impresor por donde debe cortar el documento, y que así se ajuste al formato elegido.
No suele ser necesario añadir las líneas manualmente, puesto que la mayoría de programas las añaden cuando se exporta el archivo, simplemente activando la opción para ello.
También tienes que tener en cuenta el área de anotaciones, que en ocasiones lo vas a necesitar para indicar por donde pliega el documento, la numeración del plegado, indicaciones importantes para la impresión, troqueles… etc.
Al igual que con las líneas de corte, el área de anotaciones aparecerá en el documento final para producir, siempre que se lo indiquemos a la hora de exportar el documento.
Dentro del mundo de las artes gráficas existen diferentes tipos de impresión, y con los avances que ha sufrido el sector, ya se puedeimprimir sobre casi cualquier superficie.
Te hacemos un breve resumen de los 5 tipos de impresión más frecuentes; en relieve, permeográficos, en bajo relieve, planográficos y los que no tienen forma impresora. De estos derivan sistemas de impresión tradicionales (como el offset, el huecograbado, la flexografía) y los modernos (sin forma impresora) de la impresión digital con tecnologías como el ink-jet o el tóner.
Los sistemas de impresión bajo relieve se definen así porque la zona impresora y la zona no impresa están en distintos planos, siendo la forma impresora la que está en bajo relieve.
El huecograbado es el máximo exponente de estos sistemas de impresión.
Las máquinas de impresión de huecograbado utilizan un cilindro impresor que ha sido grabado previamente con miniceldas, capaces de retener y transferir la tinta a la superficie no impresa mediante la presión entre este cilindro y el material a imprimir.
Este proceso es muy utilizado en la fabricación de packaging, de etiquetas, papeles pintados e impresión mediante transferencia.
Los sistemas de impresión en alto relieve o sistemas de impresión en relieve son aquellos cuya forma impresora tiene la zona a imprimir a en relieve. Esta forma puede ser cilíndrica o plana, aunque lo más común es encontrarla en formato circular y en rotativa.
La flexografía es la forma impresa por excelencia en este sistema de impresión. Se emplea para imprimir en cualquier material flexible en superficies no porosas. Hoy en día se mantiene su uso mayoritariamente en envases y empaquetado.
Son aquellos sistemas de impresión que tienen una forma impresora que es permeable al paso de la tinta únicamente en aquellas zonas donde se vaya a imprimir.
En este sistema destacan la serigrafía o la estampación.
La serigrafía es un proceso de impresión muy antiguo donde se aplica una tinta directamente sobre el material a través de una plancha o malla tensada. La plancha por tanto, tendrá una imagen sellada que será la que haga reproducir el diseño. Ésta hace que solo deje pasar la tinta por esa zona sellada y el resto no se imprima.
Hay que crear una plancha con un diseño para cada tinta, lo que hace que el sistema de impresión sea muy repetitivo y más costoso. Además este sistema ofrece la posibilidad de generar miles de repeticiones sin perder calidad, pero solo sale rentable para grandes tiradas..
Se utiliza fundamentalmente en productos textiles o para merchandising en todo tipo de objetos industriales de diferentes materiales; como papel, plástico, metal, superficies tridimensionales, etc.
Impresión digital en lona para cartelería de cines.
La Impresión 3D es una de las tecnologías de fabricación más innovadoras, por no decir la más innovadora, puesto que con ella se puede imprimir cualquier tipo de objeto en tres dimensiones. Esta técnica funciona mediante la superposición de capas sucesivas de un determinado material a partir de un modelo digital.
Existen diferentes tecnologías y materiales dentro de la impresión 3D, capaces de crear y replicar objetos de diferente índole. Se han llegado a imprimir prótesis para personas discapacitadas, e incluso edificios, por lo que la libertad creativa es infinita, pero siempre debes tener en cuenta los costes, el uso final del diseño y los tiempos.
Según el proceso de impresión, puedes tener mejores o peores resultados. A continuación te explicamos las ventajas y desventajas que debes tener en cuenta a la hora elegir un sistema de impresión u otro:
Para la impresión de cartelería y mupis, según sean las unidades a producir, puedes elegir diferentes procesos. El material, al utilizarse la mayoría de las veces papel, es compatible con multitud de técnicas.
Para las campañas que abarcan muchas unidades, debes recurrir a la impresión en offset, debido a que conseguirás abaratar costes.
En caso de que la campaña no cuente con muchas unidades, lo más recomendable es recurrir a la impresión digital, por su gran calidad y por su coste más económico en baja tirada.
En este tipo de trabajos el proceso de impresión más utilizado y recomendado suele ser el offset, porque generalmente son proyectos con muchas unidades de tirada, y sale mucho más económico. Además, el soporte que se suele utilizar es el papel, compatible con esta técnica.
Pasa lo mismo que con la cartelería, si es un proyecto promocional puntual o algo muy exclusivo, la impresión digital es la mejor opción.
Para la impresión sobre vinilo te recomiendo que trabajes con la impresión digital, por su excelente calidad en el acabado y por su facilidad a la hora de producir, lo que también te puede abaratar los costes.
Impresión digital en gran formato para anuncio Beefeater.
Para los proyectos de packaging y PLV, existe una mayor libertad a la hora de elegir, puesto que la elección de los materiales puede ser muy amplia, y va a depender muchísimo del diseño, del producto que se vaya a envasar, del acabado que busques, de la ubicación del producto, del cliente al que vaya dirigido… etc.
Por lo que te recomiendo que cuando vayas a realizar un diseño consultes siempre con la imprenta o empresa de producción para que te orienten sobre los diferentes procesos y puedas encontrar el más adecuado.
Entre ellos quizá puedas encontrar la impresión digital, muy adaptable a multitud de formatos y materiales, la impresión en huecograbado, recomendable por su bajo coste en grandes tiradas, y la flexografía, la técnica más utilizada en materiales transparentes y flexibles.
Como puedes ver, el mundo de la producción gráfica en un sector muy amplio, en el que te invito a que te sumerjas e investigues, para que cuando trabajes tu proyecto de diseño puedas conseguir todos los objetivos que te marques.
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